Los ladrones se llevaron 10 kilos de carne, embutidos, cigarrilos y golosinas trasladándose en motos, bicicletas y hasta caminando, durante más de una hora y media. La puerta por donde ingresaron estaba abierta debido a que su dueño olvidó cerrarla por el cansancio que tenía luego de trabajar de corrido. Juan Escobar habló sobre la identificación de los delincuentes: "Nos llamaron algunos amigos que son conocidos de esta gente que en algún momento quizás anduvo en el mismo emprendimiento, nos enteramos enseguida quienes eran. Nosotros ayudamos con esos datos y la policía actuó muy rápido, van bien encaminados". Además, Escobar posee un negocio en la construcción y un carribar frenados en actividad actualmente, pero asegura que la pollería trabaja muy bien ya que en la esquina de San Juan y Perú pasa mucha gente que apuesta al negocio de barrio. Abrió su local el 28 de diciembre con mucho trabajo y así lo mantiene hasta el día de hoy. En último lugar, reflejó su preocupación por todos los delitos que sufre la localidad en este último tiempo: "Estamos atravesando una situación incontrolable, los chicos de 15 años hacen lo que quieren. Me parece que estamos en el momento de reunirnos entre vecinos, nosotros con la policía y la policía con el intendente. Todo el mundo sabe quien vende la droga, es hora de meterle mano a esta situación".