Eduardo Oyola ejerce su profesión desde muy joven. En 1988, luego de terminar la escuela secundaria con solo 18 años, fue a Rosario para empezar la carrera de Locutor Nacional. “Comencé con esta locura como muchos le llaman, una locura linda. Tiene vaivenes como cualquier profesión”.

Lo que más lo atrapó para estudiar locución, fue el recuerdo de su padre con el brazo puesto en la ventana escuchando las radios de Rosario, que en aquel momento eran las que se escuchaban.

“Uno lleva adelante una profesión que le gusta, que la ama. No hay una palabra que la pueda encerrar. Es mucho más que la pasión, sobre todo llevarlo a una localidad como la nuestra. No hay un rango de ciudad para poder hacer lo que a uno le gusta”, expresó “Tony”.

A pesar de que le gusta la televisión, su lugar está en la radio, donde se siente mucho más cómodo. En especial, en el horario mañanero. Ahora aunque se dedica a lo digital mediante el portal Guia Media, dijo que si tuviera que volver, volvería a la radio. “La radio nos permite jugar con la imaginación del oyente”.

En la actualidad de la profesión, Oyola señaló que necesitan la aparición de nuevas y más voces. “La voz femenina es un faltante importante”.

El locutor finalizó recordando los momentos más épicos de su paso por la profesión y a la gente que lo fue acompañando en su camino. Saludo a los colegas por su día.