“No estoy bien. No sé si esto sirve de algo pero quiero decirlo. Estoy triste y cansado. Por si alguien más cree que hay que ser siempre una brisa de mar o un fuego artificial en una noche de verano. Estoy trabajando para que se me pase… llegaré a los escenarios y algo dentro me dirá que hacer. Pero a veces no quiero ni estar. Literalmente. Sólo por ser sincero. Por no entrar al ruido inútil. Sé que hay gente que se siente así. Si te sirve, yo me siento igual”; fueron las palabras de Alejandro Sanz en su cuenta de Twitter que alertaron a la comunidad sobre el estado de salud mental del artista.

En base a esta declaración, conversamos con la psicóloga Rocío DAlesio (MP 11008) quien resaltó el valor de este mensaje que transmitió el cantante y de la importancia que es hablar de estos temas que como le suceden a los famosos, al resto ambién.

Explicó: “Los psicólogos festejamos que este artista con gran alcance, haya reflejado este estado. Que a un artista con tanta relevancia le esté pasando lo mismo que a uno, alivia mucho a quienes lo está pasando y la importancia de pedir ayuda.

El estrés significa una presión que se genera sobre un cuerpo hasta cierto tiempo que toma una deformación y luego retoma el cuerpo devuelta a su lugar, pero el tema es cuando el estrés se convierte en algo crónico.

Esta experiencia de poder continuar con los shows, puede ser un recurso para poder atravesar en encontrarse con la cantidad de la gente, el apoyo, poder seguir creando y haciendo suerte que el arte tiene una importancia muy grande en estos síntomas. Puede ser favorecedor y los profesionales que lo están evaluando la situación verán la cuestión de la exposición. Cuán favorable o no puede ser en este cuadro. El poder abrirse a que uno es uno más, es un recurso muy importante.

La ansiedad uno la lleva a consulta cuando uno ya la empieza a sentir en el cuerpo. El paciente no se da cuenta porque naturalizamos el tener que estar siempre bien y cada vez los tiempos son más cortos e inhumanos, se han deshumanizado muchas cuestiones y hay que volver a humanizarlas. El acto de Alejandro Sanz fue muy valioso para quienes trabajamos en salud mental. 

Trayendo esta situación, hacemos muchas cosas sin disfrute. Se tienen que renovar los contratos de palabra. De que el otro es una persona de no actuar tan impunemente, sea en el espacio que sea. 

Antes se nos preocupaba por buscar las mentiras. Ahora tenemos que preocuparnos por buscar la verdad, porque hay tantas verdades. Al principio, cuando voy a la publicación de Sanz, digo, bueno, es él quien lo escribió. Hasta hoy fijamos van a ver cuál es la verdad, porque ya hay tantas verdades y realidades creadas que no sabemos si es verdad la verdad.

Hoy la época nos invita a eliminar rápidamente estos síntomas de tristeza, porque tenemos que ser muy productivos, y esos síntomas no nos permiten ser muy productivos. Debemos poder habitarlos, hablarlos en un espacio desde la terapia o el curso que pueda encontrar la persona para tramitar ese momento, es importante. 

Hoy hay que apostar a espacios a donde se le dé lugar a esos sentimientos. Quizás no estamos acostumbrados a esos sentimientos, y sí es una ayuda, pedir ayuda a otro, como hizo Alejandro Sanz, que lo publicó y compartió con su público. 

Siempre con el otro es mejor, y más con un profesional que por ahí pueda orientarte. Alejandro entendió que él es otra gente como todos y que todos estamos atravesados por lo mismo, en que no siempre vamos a poder brillar. Quedarse solo es contraproducente a esos síntomas. Siempre poder hablar, sentirse más humanos, que estos sentimientos también son uno más como otros”.