Esteban Pierdominici: “El básquet es más que un deporte, es una escuela de vida”
El entrenador del Club San Martín de Marcos Juárez reflexionó sobre el rol del básquet en la formación de los jóvenes, los desafíos que enfrenta el deporte en la actualidad y su impacto más allá de la cancha.

Esteban Pierdominicci
Esteban Pierdominici compartió su visión sobre el desarrollo del básquet en la ciudad de Marcos Juárez, los desafíos que enfrenta el deporte en la actualidad y el impacto que tiene en la formación de los jóvenes.
Un entrenador con vocación formativa
Desde muy joven, Esteban supo que su pasión por el básquet lo llevaría más allá de las canchas como jugador. Su interés por la táctica, la enseñanza y el liderazgo lo condujeron al camino de la dirección técnica.
“Siempre me gustó el básquet, pero con el tiempo entendí que mi verdadero lugar estaba fuera de la cancha, ayudando a otros a crecer en este deporte”, expresó.
En el Club San Martín de Marcos Juárez, ha logrado consolidar un método de trabajo basado en la disciplina, la constancia y la formación integral de los jugadores. Según el DT, el rol del entrenador no se limita a lo deportivo:
“No se trata solo de enseñar a picar la pelota o lanzar al aro, sino de formar personas con valores, con compromiso y con el deseo de superarse”.
Uno de los aspectos que Pierdominici destaca en su filosofía de trabajo es el impacto del básquet en la vida de los jóvenes. Para él, este deporte es una herramienta clave en la educación y el desarrollo personal.
“El básquet nos enseña a trabajar en equipo, a respetar reglas, a enfrentar la adversidad y a esforzarnos por mejorar cada día”, afirmó. “Siempre les digo a los chicos que lo más importante no es ganar un partido, sino el proceso que los lleva a ser mejores jugadores y mejores personas”.
A pesar del crecimiento del deporte en la región, el entrenador reconoce que hay desafíos que deben afrontarse, especialmente en el nivel formativo. Uno de los principales obstáculos es la competencia con la tecnología y las nuevas formas de entretenimiento, que muchas veces alejan a los niños y adolescentes de la práctica deportiva. “Hoy en día, los chicos tienen muchas distracciones, y el desafío es lograr que el básquet siga siendo atractivo para ellos”, explicó.
Para contrarrestar esta situación, el club ha implementado programas que buscan mantener la motivación y el compromiso de los jugadores. Entre ellos, destaca la planificación de entrenamientos dinámicos, la participación en torneos competitivos y el fortalecimiento del sentido de pertenencia al equipo.
A su vez, se muestra optimista respecto al futuro del equipo y sus jugadores. Su enfoque está puesto en la formación a largo plazo y en la consolidación de una identidad de juego.
“Queremos que nuestros equipos tengan un estilo propio, que sean reconocidos por su entrega, su intensidad y su disciplina táctica”, comentó.
El club sigue apostando a las categorías formativas como la base de su crecimiento. La captación y el desarrollo de jóvenes talentos son una prioridad para el cuerpo técnico.“Nuestro objetivo es que cada jugador que pase por San Martín no solo mejore en lo deportivo, sino que también se lleve valores y enseñanzas que le sirvan para toda la vida”, concluyó.